En el condado de Plymouth, en Massachusetts, Estados Unidos, se encuentra un impresionante vehículo conocido como «Frankenbus», que ha evolucionado de un antiguo autobús escolar GMC serie H de 1968 con carrocería Carpenter a un robusto camper todoterreno para rutas 4×4.
La tendencia de convertir viejos autobuses escolares en viviendas rodantes no es novedosa, pero lo que te presentamos hoy te dejará sin aliento.
El viaje de Frankenbus comenzó como un modesto autobús escolar, pero con el tiempo, se sometió a una metamorfosis que lo convirtió en un verdadero hogar lejos de casa.
Equipado con dos aires acondicionados en el techo, un toldo lateral y una cocina completa, el interior ofrece todas las comodidades necesarias para una experiencia de viaje cómoda.
Lee también: Los 7 juguetes más emblemáticos
El anuncio de venta destaca que el refrigerador y el calentador funcionan con propano, proporcionando comodidad tanto en climas fríos como cálidos. Además, un inversor suministra electricidad a todos los dispositivos de corriente alterna a bordo, garantizando una experiencia sin interrupciones.
Potencia Moderna en un Envoltorio Clásico
Si bien el interior es acogedor y bien equipado, la verdadera magia de Frankenbus reside bajo el capó. Se ha instalado un motor Chevrolet 454 de alrededor de 1995, emparejado con una transmisión automática 4L80E. Esto significa que este antiguo autobús ahora cuenta con una potencia relativamente moderna, lo que garantiza un rendimiento excepcional en la carretera.
Pero lo que realmente hace que Frankenbus destaque es su capacidad todoterreno. Este vehículo está equipado con tracción en las cuatro ruedas, lo que lo convierte en una opción perfecta para aventuras fuera de la carretera. Sus enormes neumáticos de 49 pulgadas le permiten enfrentar terrenos difíciles con total comodidad.
Un Historial de Aventura
El dueño de Frankenbus solía llevar este vehículo a la playa, incluso antes de su impresionante transformación. Ahora, con su potencia, versatilidad todoterreno y comodidades modernas, este camper 4×4 es mucho más que un simple vehículo de playa. Puede aventurarse en los rincones más remotos y desafiantes, ofreciendo una experiencia de viaje única.
El resultado final de Frankenbus recuerda a esas costosas camionetas camper todoterreno, pero es más grande y probablemente no costó tanto como ellas. Su versatilidad y capacidad para adentrarse en lo desconocido lo convierten en una elección emocionante para los amantes de las aventuras al aire libre.
Frankenbus es la prueba de que la creatividad y la ingeniería pueden transformar algo común en algo verdaderamente extraordinario.
Fuente: Klassmanblog